Hoy, día 27 de diciembre, festividad de San Juan Evangelista, diversas Cofradías realizan cultos litúrgicos en su honor
Junto a la cruz de Jesús estaban su madre, la hermana de su
madre, María, la de Cleofás, y María, la Magdalena. Jesús, al ver a su madre y
cerca al discípulo que tanto quería, dijo a su madre: «Mujer, ahí tienes a tu
hijo.» Luego, dijo al discípulo: «Ahí tienes a tu madre.» Y desde aquella hora,
el discípulo la recibió en su casa. (San Juan18, 1-19, 42).
SAN JUAN, Apóstol y Evangelista, el discípulo predilecto,
recostó su cabeza en el pecho de Jesús en la última Cena y allí bebió aquella
celestial dulzura que brilla en él. A más del cuarto Evangelio es autor de
varias cartas y del libro profético llamado “Apocalipsis”, que escribió en
Patmos, donde fue relegado por confesar al Maestro. Murió en Éfeso rodeado de
discípulos, a los que según la tradición daba siempre la misma lección: Amaos
los unos a los otros. Preguntado por qué enseñaba siempre lo mismo, respondió:
Porque éste es el mandamiento del Señor y, cumpliéndolo, basta.
No quiso Jesús que muriera mártir (Evang.), sino le prolongó
la vida hasta una avanzada ancianidad, para que refutase en su Evangelio las
herejías nacientes, y fuese el apóstol de la fraterna caridad.
El DISCÍPULO AMADO, San Juan Evangelista, que abrió su boca
en medio de la Iglesia y descubrió los misterios profundísimos de la humanidad
y divinidad de Cristo. Aparece en la Semana Santa almeriense de la capital en las siguientes corporaciones penitenciales.
En la Hermandad
Eucarística de la Santa Cena (Parroquia de San Pedro Apóstol), bella estampa
del conjunto de imágenes representa la institución de la Eucaristía en la
última cena de Jesús con los doce apóstoles obra de Juan Antonio Navarro
Arteaga, 1996/1999, en madera de cedro, policromada, sobre todo cuando vemos el
mayestático paso de misterio discurrir entre los Conventos de Clausura de
Almería recibiendo las ofrendas, entre pétalos y oraciones, de las monjas de
clausura; en la en la sacra conversación con María Santísima de Gracia y Amparo
(Parroquia de Santa María Magdalena - estuvo saliendo desde los aledaños de la Capilla de San Antonio de Padua - ), anatomizado y tallado en cedro real y
policromado al óleo, obra en 1999 de Salvador Madroñal; en el majestuoso Paso de Misterio del Prendimiento de
Jesús en el Huerto de los Olivos ( S.y A. Iglesia Catedral de la Encarnación), obra de Dubé de
Luque,1992, en madera de cedro, policromada, recibiendo toda la hermandad el
clamor jubiloso durante toda su Estación de Penitencia con el acompañamiento de
cientos de fieles con promesas; en el Paso mayéstatico de Nuestro Padre Jesús de la
Redención en su Sagrado Descendimiento, (Parroquia de San Agustín, antigua iglesia de los padres franciscano, OFM), obra de Eduardo Espinosa Cuadros, en madera
de pino policromada - 1947- , con el silencio blanco solo roto con la suavidad del
sonido de la música de capilla; en la Hermandad del Santísimo Cristo de la
Caridad en su traslado al Sepulcro obra de Juan Manuel Miñarro, 2004,
(actualmente en la iglesia de Santa Teresa de Jesús en el Barrio de Oliveros - hace unos años en la iglesia de San Francisco de Asís en el Barrio del Quemadero-), en
madera de cedro policromada, con toda la sobriedad y austeridad de la Semana
Santa; y en el Paso alegórico del Duelo de la vuelta del Sepulcro 1997-2004, que
escenifican el Misterio el regreso tras el entierro de Cristo obra de Juan
Manuel Miñarro López en madera de cedro, policromada, paso que recibe, tras el
Paso de la Cofradía de La Soledad,
camino de su sede canónica en la Parroquia de Santiago Apóstol, en el silencio
de la madrugá, solo roto por la pisada de los costaleros y las saetas más
sentidas y arraigadas de la religiosidad popular almeriense.
Igualmente, encontramos la efigie de San Juan Evangelista en
su sacra conversación con la Virgen del Mayor Dolor y Traspaso (Parroquia de
San Pío X), que no procesiona actualmente, obra de David Valenciano Larios, en madera de
cedro, policromada, 2004-2005; San Juan Evangelista en el Paso de El Calvario
de Miguel Bejarano Moreno, que actualmente procesiona el Sábado Santo con el Santísimo Cristo del Mar y la Virgen de Las Lágrimas desde la Iglesia de San Roque en el barrio de Pescadería. Tampoco procesiona la anterior imagen de San Juan Evangelista obra
del almeriense Jesús de Perceval, 1946 (Cofradía de La Soledad), que se
encuentra depositada y custodiada por la Sacramental Cofradía de La Soledad - imagen fotografía-.
Asimismo, recordar con tintes de nostalgia sentimental, que
el Paso del Santísimo Cristo del Amor estaba integrado por el Crucificado obra
de Jesús de Perceval, acompañándole la imagen de la Virgen, San Juan y María
Magdalena, obras de Francisco Campos Serrano, figuras que años más tarde
pasarían a forma parte del grupo escultórico del Calvario y actualmente retiradas
del concierto cofrade.
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