PEDRO Asensio en su plena madurez intelectual y con metabolizado espíritu Indaliano nos ha deleitado en este final del milenario ejercicio económico taifal o cantonal de brotes verdes con un magistral manuscrito lleno de sensibilidad exquisita hacia la protagonista del libro, nuestra siempre llorada catedrática y poetisa Celia Viñas, y que ha venido a servir de exponente de un anticipado prólogo a este año de gracia electoral, y que comenzamos con las catedralicias pasas al celebrar el centenario del nacimiento del docto artista Indaliano más emblemático del siglo XX en Almería, Jesús de Perceval.
De la presentación de la publicación editada por Verbum "Los años de la señorita Celia", en el Día Internacional de la Palabra, en la Sala Capitular de la soberanía municipal almeriense, en donde debería de estar siempre ondeando con barroca solemnidad el 525 tremolado "Pendón Morado de Castilla", en las voces académicas de los juristas Fausto Romero-Miura y Jesús Ruz de Perceval, quienes expusieron con don de la palabra, de forma sucinta, el sentir fehaciente, notorio y público de tan excelsa obra literaria escrita con esmero literario y rigor histórico por nuestro escritor almeriense Pedro Asensio, y cuya calificación doctoral "In lumine Sapientia Universitas Almeriensis" de la máxima nota de "cum laude" sobresaliente.
"Los años de la señorita Celia" es una novela inspirada en la realidad, en la que Pedro Asensio va hilvanando a lo largo de los monacales capítulos, un adagio al compás de una bella sinfonía de música pasional por la cultura en una época marcada por la cansina negritud de la represión intelectual con un entorno socio-económico complejo y difícil de carestía, debido a la siempre falta de sincero apoyo institucional hacia quienes transmitían a través del Arte un humanismo solidario impregnado de un sentido esperanzador de un mañana mejor - el Grupo Indaliano -.
Finalizo con las palabras de conclusión expositiva del autor durante la presentación del libro en el Salón de Plenos del Ayuntamiento de Almería sito en la constitucional Plaza Vieja «Este año 2015, se cumple el centenario del nacimiento de Celia y Perceval. Esperemos que Almería, sus instituciones y la sociedad civil aprovechen la efeméride para continuar difundiendo su legado entre las generaciones de almerienses que, lamentablemente, desconocen su inestimable aportación».
Rafael Leopoldo Aguilera Martínez
http://www.elalmeria.es/opinion/detail.php?id=1937550#opi
De la presentación de la publicación editada por Verbum "Los años de la señorita Celia", en el Día Internacional de la Palabra, en la Sala Capitular de la soberanía municipal almeriense, en donde debería de estar siempre ondeando con barroca solemnidad el 525 tremolado "Pendón Morado de Castilla", en las voces académicas de los juristas Fausto Romero-Miura y Jesús Ruz de Perceval, quienes expusieron con don de la palabra, de forma sucinta, el sentir fehaciente, notorio y público de tan excelsa obra literaria escrita con esmero literario y rigor histórico por nuestro escritor almeriense Pedro Asensio, y cuya calificación doctoral "In lumine Sapientia Universitas Almeriensis" de la máxima nota de "cum laude" sobresaliente.
"Los años de la señorita Celia" es una novela inspirada en la realidad, en la que Pedro Asensio va hilvanando a lo largo de los monacales capítulos, un adagio al compás de una bella sinfonía de música pasional por la cultura en una época marcada por la cansina negritud de la represión intelectual con un entorno socio-económico complejo y difícil de carestía, debido a la siempre falta de sincero apoyo institucional hacia quienes transmitían a través del Arte un humanismo solidario impregnado de un sentido esperanzador de un mañana mejor - el Grupo Indaliano -.
Finalizo con las palabras de conclusión expositiva del autor durante la presentación del libro en el Salón de Plenos del Ayuntamiento de Almería sito en la constitucional Plaza Vieja «Este año 2015, se cumple el centenario del nacimiento de Celia y Perceval. Esperemos que Almería, sus instituciones y la sociedad civil aprovechen la efeméride para continuar difundiendo su legado entre las generaciones de almerienses que, lamentablemente, desconocen su inestimable aportación».
Rafael Leopoldo Aguilera Martínez
http://www.elalmeria.es/opinion/detail.php?id=1937550#opi
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