Pasión estelar durante el Encuentro en la plaza Circular. La lluvia hizo recogerse el cortejo en la Iglesia de San Pedro para continuar posteriormente con gran esfuerzo la Estación de Penitencia.
“Hoc facite in team commemorationem”. En la mañana del Jueves Santo, con un cielo cubierto con nubes que no dejaban traspasar los rayos de sol, y un aire fúnebre que presagiaba el IV de los misterios del Vía Crucis, el encuentro del Nazareno con la Virgen de la Amargura, en presencia de la Verónica, se llevó a cabo, tras el rezo del Ángelus en la sede canónica de la Ilustre Cofradía de Nazarenos, parroquia de San Antonio de Padua, regida por sacerdotes del Opus Dei pertenecientes a la Sociedad sacerdotal de la Santa Cruz, el llamado “retranqueo” de los tres pasos, cuyas primeras “levantás” fueron llevadas por Rafael López, Presidente de la Asociación de Vecinos de San Antonio, Alfredo Casas, Hermano Mayor del Perdón y Manuel Guzmán, Gerente del Plan Urban. A continuación, ante dos centenares de cofrades, entre costaleros y nazarenos, el Consiliario Jaime Palacios Floriach dirigió unas palabras de meditación y reflexión sobre el verdadero significado de la Estación de Penitencia y la asistencia al Triduo Pascual.
Tras los Santos Oficios, y las palabras de exhortación de la Hermana mayor María Belén García Suánez, sonó la campana del Diputado Mayor de Gobierno Pedro Sánchez, y las puertas del templo se abrieron, comenzando a salir tras la cruz de guía la sección de nazarenos del paso alegórico de la Verónica, portado al estilo de trabajadora “malagueña”, y dirigido por la magistral capataz Belén García y la contraguía Verónica Eyra, con los sones de la Asociación Musical Cristo de las Penas de Lanteira.
A continuación, tras la sección de nazarenos, hizo su salida el paso del Nazareno, vestido por los cofrades Paco Vargas y Enrique Martínez con una sobria túnica morada sin ningún adorno, que impregnaban a cuantos lo presenciaban el momento actual de la falta de necesidades espirituales y económicas. El paso portado por excelentes costaleros a estilo de trabajadera “sevillana” iba dirigido con el afamado capataz Francisco Javier López, y los contraguías Sergio Rivas, José A. Sánchez y Vicente Martínez, con el acompañamiento musical de la Asociación Musical Nuestra Señora de las Angustias de Vera.
Cuando el Nazareno enfiló su camino por la Plaza de España, y la enseña nacional colocada en la citada plaza se enarbolaba con el brisa marina, la sección de nazarenos del paso de la Virgen de la Amargura, vestida con exquisitez por el Cuerpo de Camareras, y dirigiendo el paso el capataz José Antonio Ferre y contraguía Antonio Sánchez, con los acordes musicales de la Banda de Música de Eladio Guzmán de Canjáyar. Destacar la presencia de miembros del Benemérito Cuerpo de la Guardia Civil acompañando al paso de Virgen cuyo palio era nuestro bello cielo almeriense en la negritud de su atardecer.
Emocionante la llegada de la Virgen de la Amargura al establecimiento Gran Hotel Almería, que fue recibido por una multitud de personas congregadas en la Avda. Reina Regente, y por el Alcalde de la ciudad, autoridades y Milagros Fábregat, Presidenta del Certamen literario organizado por la entidad Citymar, dirigiendo una glosa poética el Hermano mayor del Perdón Alfredo Casas, para continuar su tránsito hasta la Plaza Emilio Pérez, donde se produjo el tradicional, multitudinario y emotivo encuentro entre las imágenes sagradas a los sones del Himno Nacional, máxima tributación de la sociedad civil al Señor de la Vida y la Esperanza y su Santísima Madre.
Destacar la ornamentación floral de los tres pasos, siendo una de las características conservadoras de nuestras procesiones de antaño. Asimismo, las primeras y últimas “levantás” de los pasos fueron ejecutadas por el periodista Rafael López y director Gran Hotel Antonio Fernández (Verónica), el Teniente de Alcalde Juan Megino y el Pregonero Manuel Martínez (Nazareno), y la concejal de cultura Lola de Haro y el periodista Manuel Morales (Virgen).
Tras el Encuentro, y camino de carrera oficial cayó una tromba de agua que tuvieron que recogerse provisionalmente en la Iglesia de San Pedro. Una vez que el tiempo dió una tregua, se reorganizó el desfile procesional, y marchó camino de la sede canónica en la Iglesia de San Antonio de Padua en Ciudad Jardín. Gran esfuerzo el realizado por los hermanos y hermanas de la Cofradía del Encuentro, que una vez demostraron su tesón y entrega ante las dificultades sobrevenidas e imprevistas en la Estación de Penitencia
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